El hombre superior y el hombre inferior como aspectos de la personalidad

Al consultar el I Ching como un maestro (utilizándolo a diario como un oráculo), vemos que se centra en armonizar la personalidad con el orden cósmico en su totalidad. En términos sencillos, esto quiere decir aprender a actuar de manera coherente con nuestro sentido interno de verdad más profundo. El I Ching llama a esto el camino del hombre superior.

Podríamos preguntarnos: ¿por qué alguien podría pensar que no lo hace ya?, y ¿acaso no actuamos desde la verdad todo el tiempo?. Los antiguos sabios chinos opinaban que nuestra naturaleza original es inocente, pura y buena, y que nuestros impulsos originales son así mismo buenos porque emanan de nuestra verdad interior. Observaron que las condiciones sociales hacen que perdamos tanto el sentido de inocencia y pureza como nuestra capacidad para responder desde nuestro sentido interno de verdad; una respuesta que siempre es espontánea y que carece de premeditación. Observaron, además, que cuando somos capaces de responder desde nuestra inocencia original, nuestras respuestas se adaptan perfectamente a la situación en cuestión...

...La personalidad se separa de nuestra inocencia natural y de su conexión con la verdad interior a causa de las acciones desvastadoras de lo que el I Ching describe como "los inferiores". Estos son elementos infantiles de la personalidad que están influenciados por miedos y dudas introducidos desde fuera. Los miedos y dudas que agitan a los inferiores pueden ser ya viejos y venir desde dentro o, nuevos, propuestos por los demás...

... Sean viejos o nuevos, si nos entretenemos con tales pensamientos, les damos credibilidad y, por tanto, poder.

A medida que los miedos y las dudas se introducen en nuestra mente y se convierten en elementos de nuestro programa interno,pasan a inmovilizar nuestra perspectiva emocional en ciertos aspectos, imposibilitando que responda de manera natural e inocente. Esta aceptación de pensamientos que no están en armonía con el cielo se produce ya en la temprana infancia y continúa durante todos nuestros años de formación. El efecto de este condicionamiento es que se suprime, poco a poco, nuestra naturaleza verdadera original y se reemplaza con una personalidad recién construida y falsa que el I Ching denomina el hombre inferior o ego...

...En los hexagramas, las acciones del yo verdadero y falso se describen como las acciones del hombre superior y el hombre inferior. Se muestran como direcciones de acción opuestas que, o bien nos llevan a la armonía con el Tao, llamado "éxito" por el I Ching, o en contra de la armonía, lo que se llama "infortunio". El éxito o el infortunio se acumulan para convertirse en un patrón de vida global llamado destino. El éxito del momento viene a ser un paso en el camino del desarrollo espiritual mientras que el infortunio es un paso en la senda que nos acaba llevando a un punto muerto. El hombre superior bien desarrollado y firmemente establecido está en tal armonía con las fuerzas beneficiosas de la naturaleza que todas las cosas funcionan en su favor...

...El trabajo de desarrollo personal es el de resolver todas las desavenencias internas y lograr la integridad de la personalidad. Cuando se desplaza al falso yo, se vence la dispersión de la personalidad, y nuestro aislamiento de la ayuda cósmica  se acaba. Las enfermedades que tienen sus raíces en un conflicto interno se vencen gradualmente y acaban desapareciendo. Los conflictos con los demás, también desaparecen.

Filosofía del I Ching - Carol Anthony